Funcionarios israelíes explican el equilibrio entre el genocidio manifiesto y el mantenimiento del apoyo occidental

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    Uno de los argumentos que los apologistas de Israel suelen repetir, es que Israel no puede estar actuando con intenciones genocidas en Gaza, porque si hubiera querido exterminar a los palestinos, podría haberlo hecho fácilmente en cuestión de días.

    Por pura casualidad, los líderes del gobierno israelí acaban de desmentir este argumento con admisiones públicas sorprendentemente francas.

    Al explicar la decisión de permitir una cantidad minúscula de ayuda a Gaza tras meses de hambruna deliberada, el primer ministro Benjamin Netanyahu declaró el Lunes que Israel ahora permite una “ayuda humanitaria mínima” ante la insistencia de funcionarios occidentales para que apoyen la operación asesina de Israel para conquistar el enclave.

    Jeremy Scahill informa lo siguiente para Drop Site News:

    “Vamos a tomar el control de toda la Franja de Gaza”, prometió Netanyahu el Lunes en un video publicado por su oficina, en el que anunció que Israel comenzaría a entregar ‘ayuda humanitaria mínima: sólo alimentos y medicamentos’. Netanyahu afirmó que la presión internacional, incluyendo la de senadores republicanos proisraelíes y la Casa Blanca, requería la apariencia de una intervención humanitaria. ‘Nuestros mejores amigos en el mundo senadores que conozco como firmes partidarios de Israel nos han advertido que no pueden apoyarnos si surgen imágenes de hambruna masiva’, dijo. ‘Vienen a mí y me dicen: Les daremos toda la ayuda que necesiten para ganar la guerra … pero no podemos recibir imágenes de hambruna”, añadió Netanyahu. Para continuar la guerra de aniquilación, afirmó, “debemos hacerlo de forma que no nos detengan”.

    Como de costumbre, el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, fue aún más allá al decir la parte discreta en voz alta, y revelar todo el asunto, explicando que Israel proporciona la ayuda justa como para mantener el apoyo occidental y evitar acusaciones de crímenes de guerra, mientras avanza en su operación de limpieza étnica en la Franja de Gaza, alardeando de la habilidad del gobierno para “manejar” esa línea.

    Algunas citas selectas de Smotrich, cortesía del mencionado artículo de Drop Site News:

    • Smotrich afirmó que el plan de ayuda permitiría a “nuestros amigos en el mundo seguir brindándonos un paraguas internacional de protección contra el Consejo de Seguridad y el Tribunal de La Haya, y que sigamos luchando, si Dios quiere, hasta la victoria”.
    • “La [ayuda] que entrará en Gaza en los próximos días es mínima. Unas pocas panaderías repartirán pan pita a la gente en los comedores públicos. La gente de Gaza recibirá un pan pita y un plato de comida, y eso es todo. Exactamente lo que vemos en los videos: gente haciendo fila esperando a que alguien les sirva un plato de sopa”.
    • “A decir verdad, hasta que regrese el último rehén, tampoco deberíamos dejar entrar agua a la Franja de Gaza. Pero la realidad es que, si lo hacemos, el mundo nos obligará a detener la guerra inmediatamente y a perderla. Sería ganar la batalla y perder la guerra. Estoy comprometido a ganar la guerra”. Estamos desmantelando Gaza y dejándola reducida a escombros, con una destrucción total sin precedentes a nivel mundial. Y el mundo no nos detiene. Hay presiones. Hay quienes nos atacan; intentan detenernos; no lo consiguen. ¿Saben por qué no lo consiguen? Porque estamos gestionando la campaña con responsabilidad y prudencia, y así es como seguiremos haciéndolo.
    • Smotrich afirmó que las fuerzas israelíes están iniciando una campaña para obligar a los palestinos a refugiarse en el sur de Gaza y, de allí, si Dios quiere, a terceros países, como parte del plan del presidente Trump. Ésto es un cambio de rumbo histórico, nada menos.

    Smotrich también elogió a las FDI por atacar deliberadamente a civiles e infraestructura civil, diciendo: “Las FDI finalmente están llevando a cabo una campaña contra el gobierno civil de Hamas … eliminando ministros, funcionarios, cambistas de dinero y figuras del aparato económico y gubernamental”.

    Así que, ahí lo tienen, explicado con claridad. No hay necesidad de preguntarse por qué Israel ha prolongado sus atrocidades genocidas durante más de un año y medio, en lugar de aniquilar descaradamente a todos los palestinos en una rápida campaña de tierra arrasada. Israel nos ha explicado por qué. Han optado por su enfoque de estrangulamiento a cámara lenta, porque es lo necesario para mantener el apoyo esencial de Occidente y evitar los tribunales por crímenes de guerra.

    Ésto ocurre mientras los gobiernos de Francia, Canadá y el Reino Unido advierten públicamente a Israel que podrían empezar a imponer sanciones selectivas a Tel Aviv, si no permite la entrada de más ayuda a Gaza y frenar sus abusos en Cisjordania. Por lo tanto, Israel es plenamente consciente de que se encuentra en una delicada línea entre (a) convertir Gaza en un infierno inhabitable para los palestinos, y (b) mantener el apoyo occidental. Así que está haciendo las concesiones más pequeñas que cree poder permitirse para conservar tanto (a) como (b).

    La respuesta occidental a la criminalidad de Israel ha sido hasta ahora débil, patética y totalmente insuficiente. La denuncia de Australia sobre la guerra de hambre israelí es aún más ineficaz que la de Francia, el Reino Unido y Canadá. Pero estamos viendo algunos avances, lo que demuestra que estos gobiernos occidentales no son del todo insensibles a las presiones internas de su ciudadanía.

    Acabo de ver un tuit de Trita Parsi, del Instituto Quincy, que dice lo siguiente:

    “Algo está sucediendo. El número de funcionarios gubernamentales de todo el mundo a quienes he escuchado en conversaciones privadas calificar como genocidio la masacre de Israel en Gaza, sin reservas ni advertencias, ha aumentado drásticamente en las últimas semanas. El dique se está rompiendo”.

    Manténganse presionando.

     

     

     

    Traducción: Ms. Lic. Cristian Vasylenko

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